Días después de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Uruguay, llevadas a cabo el 24 de noviembre de 2019, la Corte Electoral no puedo pronunciar cuál de los candidatos había resultado ganador.
Los comicios se desarrollaron de forma pacífica con el 90% de participación ciudadana y finalizaron alrededor de las 19:30 con el cierre de las mesas. Los votos escrutados en primera instancia arrojaron como ganador al candidato del Partido Nacional (PN), Luis Lacalle Pou, por una débil diferencia de 1,2% de los votos frente al candidato del Frente Amplio (FA), Daniel Martínez. Es así como, los resultados recogidos son de 1.168.019 votos para Lacalle Pou y de 1.139.353 para Martínez, generándose una diferencia de 28.666 votos entre uno y otro.
Sin embargo, existe cerca del 1,3% de votos observados, es decir, aproximadamente 35.229 votos en los que por diferentes motivos debe reconfirmarse que sean válidos ante dudas sobre identidad del votante, cuestiones técnicas del padrón, o la existencia de votos de ciudadanos que no votaron en su circuito electoral correspondiente.
Esta diferencia pone en vilo no solo a la sociedad uruguaya, sino también a los gabinetes políticos, expectantes para iniciar el juego de poder. Esta situación, a su vez, complica al candidato Martínez, dado que de esa diferencia necesitaría al menos el 91% a su favor para imponerse sobre Lacalle Pou. Este último, según diversos analistas, supo interpretar mejor el juego político, aliándose con el Partido Colorado, encabezado por la figura de Talvi; el candidato del Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos; el Partido de la Gente y el Partido Independiente; minorías en las elecciones anteriores que a razón de la creación del “Partido Multicolor” al que apelaba Lacalle, lo posicionaron primero en la segunda vuelta de las elecciones.
Posterior a que se conocieran los resultados parciales de los comicios, Martínez pronuncio que “… en ninguno de las dos opciones el ganador contará con el 50% de los votos en el Congreso” por lo que continúa diciendo que “estamos ante la tarea histórica de buscar los entendimientos que nos permitan pensar en un solo país”.
Cabe destacar la cultura democrática en la sociedad uruguaya, que a pesar de haber esperado en vilo cuatro días por los resultados de unas elecciones tan importantes como las presidenciales, no se ha manifestado de manera revolucionaria. Mas allá de haber existido algunos focos de conflicto, que han sido rápidamente sosegados, la situación no ha pasado a mayores como fue el caso reciente de Bolivia. Denota la calidad institucional en el país vecino y, aun más, la cultura cívica de su ciudadanía en los valores de la vida en democracia y la transparencia.
Los resultados oficiales de las elecciones se conocieron el jueves 28 de noviembre, después de cuatro días en los que la Corte Electoral de Uruguay ha llevado a cabo un segundo conteo de los votos. Finalmente, se confirmó lo que los resultados parciales arrojaron y Luis Lacalle Pou será el nuevo presidente para el periodo 2020-2025 del Estado Oriental con 1.142.571 votos a favor.